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02/09/2021Cornelio Saavedra
POR
ANDRES AVENDAÑO ROJAS
Presidente de la Academia de Historia Militar
En el cuerpo Reportajes del diario El Mercurio, del domingo recién pasado, el constituyente Benito Baranda señaló que fue descubriendo “… que en La Araucanía no fue una pacificación, que Cornelio Saavedra no fue un héroe, fue bastante más brutal lo que sucedió…”. Más adelante agregó, “Eso puede llevar a tomar nuevas posiciones frente a la historia oficial, de historiadores oficiales, de las élites oficiales”.
Ignoró qué historiadores consultó el Sr. Baranda para modificar su percepción de la integración de La Araucanía a la soberanía del Estado de Chile, pero a fin de evitar una indebida y, supongo, no deseada instrumentalización política de su reciente descubrimiento, me permito puntualizar que la estirpe militar y republicana del general Cornelio Saavedra es extensa; él condujo con éxito las operaciones en La Araucanía de acuerdo a un plan aprobado por el Gobierno de la época y obedeciendo sus instrucciones, y además, estamos hablando del oficial de nuestro Ejército que encabezó —exigiendo la mayor contención y disciplina a las tropas—el ingreso a Lima en enero de 1881. Está, pues, suficientemente acreditado que, según los parámetros de la época, cumplió ejemplarmente con su deber en misiones sumamente delicadas.
Respecto a los Héroes, quisiera precisar que, como señala Paul Johnson (Héroes, 2009), Colón, Cortés y Pizarro son considerados hoy imperialistas de la peor calaña, dado que el criterio principal para la denominación de héroe ha sido “el veredicto del público y siendo este arbitrario, excéntrico y con frecuencia irracional (además de cambiante) el asunto puede resultar peliagudo”. Si Cornelio Saavedra fue héroe o no, debe ser la “historia”, en función de sus aportes reales y objetivos, quien debe juzgarlo y, ojalá, se evite usar su nombre para sostener ideas particulares. En todo caso, los juicios anacrónicos son siempre discutibles.